Uno de sus usos más claros es crear rizos perfectos en mujeres que, si bien son crespas, no lucen ondas muy definidas, lo que hace que su cabello pierda forma y se vuelva más bien una maraña de pelo.
Su objetivo es obtener un rizado duradero aplicando productos químicos que des-estructuran el cabello para luego re-estructurarlo con los rizos deseados, ondas o lacios. Los tubos se utlizan para dar la forma y el tamaño a tus rulos según el molde que escojas: los hay para crear rulos cerrados, sueltos, con efecto chato o bucles.
La solución permanente que se aplica levanta la capa de la cutícula del cabello, rompiendo los enlaces que le dan su apariencia regular. Generalmente lleva de 1 a 2 horas realizarlo. Luego se aplica el neutralizante, que forma los nuevos enlaces y proporcional una nueva estructura.